Jardines verticales: ¿Arte o eficiencia energética?

Patrick Blanc ha creado grandes jardines verticales en importantes edificios de Londres, París, y unos que nos pillan más a mano como en la plaza de España de Tenerife o el CaixaForum de Madrid.
Éstos "se han convertido en una obra de arte más del museo", como asegura la directora del CaixaForum. Pero además estos jardines nos demuestran que la vegetación no siempre necesita de tierra, por lo que en las ciudades tienen gran potencial.
Las plantas del muro ayudan a limpiar la contaminación y sirven como aislamiento térmico: en invierno protegen al edificio del frío y en verano funcionan como un sistema de refrigeración.
"Hace unos años se trataba de instalar plantas donde jamás lo esperarías. Ahora se trata de mostrar que la naturaleza puede crecer en cualquier parte y que nada está perdido", afirma Blanc.
Las claves del éxito de este botánico son: comprobar que las plantas no necesitaban tierra para vivir y el siguiente paso fue concebir una estructura que impidiera a las raíces de las plantas penetrar en los cimientos de los edificios y causarles daños irreparables y al mismo tiempo asegurar la vida del muro vegetal.
Para ello separa la pared del jardín. Deja un espacio entre ambos gracias a una estructura de metal.
"Un plástico recubre esta estructura para darle rigidez y convertirla en impermeable, a lo que finalmente se añade un fieltro sintético en el que se enraizan las plantas", se explica en el artículo.
Creo que es una muy buena solución para mejorar el aislamiento de edificios en las ciudades, dando mejor estética a éstas y a la vez limpiando un poco la atmósfera. Deberían enseñar estas prácticas en talleres de jardinería.
(Esta información ha sido extraída del artículo "Arte que respira" de la sección "tierra" del periódico de "El País" 17 de abril de 2010)

No hay comentarios:

Publicar un comentario